viernes, 21 de junio de 2013

Lamentaciones de Jeremías

PIEZA 14




Aleph

¡Qué solitaria está la ciudad antes populosa! Se ha quedado como una viuda la grande entre las naciones, la princesa de las provincias se ha hecho tributaria.

Beth
Pasa la noche entera llorando, le recorren las lágrimas por las mejillas; Jerusalén, Jerusalén, conviértete al Señor tu Dios.

Bau
La hija de Sión ha perdido toda su hermosura; sus príncipes, como ciervos que no encuentran pasto, marchaban sin fuerza delante del que los iba persiguiendo. Jerusalén, Jerusalén, conviértete al Señor tu Dios.

Jod
El enemigo ha echado mano a todos sus tesoros; ella ha visto a los gentiles penetrar en su santuario, aunque Tú habías prohibido que entraran en tu congregación.

Caph
Todo su pueblo, entre gemidos, anda buscando pan; ofrecían sus tesoros por comida para reanimar su espíritu, Mira, Señor, fíjate como estoy envilecida.

Heth
El Señor ha decidido arrasar la muralla de la hija de Sión; extendió su cordel y no apartó la mano de la destrucción; de luto quedaron los muros y los baluartes al desmoronarse juntos. Jerusalén, Jerusalén, conviértete al Señor tu Dios.

Lamed
A sus madres preguntaban: ¿dónde hay pan y vino?, mientras desfallecían, heridos de muerte, por las calles de la ciudad.

Mem
¿Con quién te voy a comparar si se asemeja a ti, hija de Jerusalén?¿A quién te igualaría yo para consolarte, oh doncella, hija de Sión? Jerusalén, Jerusalén, conviértete al Señor tu Dios.

Estas lamentaciones se profirieron en Jerusalén, 31°46′44″N 35°13′31″E